Gestionar con éxito los riesgos psicosociales

En los últimos años estamos viviendo un contexto diferente en el ámbito laboral, resultado, entre otros factores, de las nuevas formas de trabajo. Pero también marcado por factores extralaborales consecuencia de los cambios globales.

Una consecuencia de esta situación es el consecutivo aumento y, todavía en alza, del absentismo laboral relacionado con causas asociadas a la salud mental. Es por ello, que las organizaciones consideran cada vez más importante velar por la salud emocional de sus trabajadores.

Esta norma surge con el objetivo de ir más allá de la gestión de los riesgos derivados de los peligros físicos, intentando conseguir la misma evolución y avance en la gestión de los peligros psicológicos y el impacto negativo del trabajo en la salud emocional. AENOR ha desarrollado un esquema de certificación basado en la Norma ISO 45003 que las organizaciones están utilizando como base de la gestión de este tipo de riesgos.

Haciendo uso de las orientaciones recogidas en la norma, y ampliando aún más el marco, las organizaciones establecen varios principios de actuación para la gestión del riesgo psicosocial, entre ellos:

• El riesgo psicosocial se aborda desde una doble perspectiva: laboral y extralaboral.
• Con un apoyo visible y comprometido por parte de la Dirección.
• Participación de los trabajadores. Las organizaciones deben ofrecer a los trabajadores la oportunidad de dar su opinión sobre los riesgos psicosociales para conocer qué peligros hay y dónde están localizados.
• Involucrando a todas las áreas en su compromiso por el bienestar, lo que permite no solo una perspectiva global, sino también el uso de diferentes tipos de indicadores. Para ello se utilizan varias fuentes de datos, por ejemplo, datos de absentismo, bajas por enfermedad, reclamaciones de los trabajadores, rotación laboral, motivos aportados por los trabajadores cuando dejan voluntariamente la organización, etc.
• Tomando como base el uso de estudios psicosociales, se utilizan técnicas no solamente cuantitativas sino también técnicas cualitativas que permiten, una vez detectado que hay un problema, localizarlo, identificar la causa y, por lo tanto, conocer cómo combatirlo.
• Para actuar, se definen una jerarquía de controles: eliminar el riesgo, reducir su exposición, minimizar el daño y establecer medidas de rehabilitación y retorno al trabajo una vez producido el daño.
• Se debe llevar a cabo a través de tres tipos de intervención:
  
  
  • Primaria: intervenciones preventivas dirigidas a toda la organización con la idea de modificar o eliminar las fuentes de riesgo y así disminuir el impacto negativo.
  • Secundaria: detección precoz de los riesgos y los grupos a los que atañe.
  • Terciaria: medidas, acciones y estrategias dirigidas a minimizar los efectos de los problemas detectados.
    
    
• El seguimiento y medición se realiza de forma proactiva, para medir las acciones preventivas que se están llevando a cabo, y de forma reactiva, con el fin de conocer la eficacia de las acciones correctivas derivadas de problemas ya identificados.

• Promoción de la salud física y mental. Ambas están estrechamente vinculadas, pues si una no es buena repercutirá negativamente en la otra y viceversa.
• Aprobación de políticas de bienestar. Antiacoso, violencia, igualdad y diversidad, etc.
• Mejora de la conciliación y flexibilidad horaria. Reduce el estrés, el agotamiento y aumenta la calidad de vida.
• Promoción de la participación de los trabajadores: a través de herramientas que permiten un mayor número de canales de comunicación mejorando la integración de los empleados y la interacción.
• Adecuada gestión de equipos y organización del trabajo: proporcionando formación y herramientas para la implantación de un estilo de liderazgo basado en una adecuada gestión de personas y reparto del trabajo.
• Fomento de la motivación laboral.
• Planes de formación y carrera personal.
• Herramientas que permitan acudir a atención profesional personalizada.
• Gestión de nuevas formas de trabajo, como, por ejemplo, trabajo en remoto.

Dado que el impacto en la salud emocional es difícil de medir a corto plazo, la mayoría de las organizaciones esperan poder ver el impacto a medio plazo, cuyos beneficios, entre otros, serian:

• Disminución del absentismo laboral.
• Cumplimento legal.
• Aumento de productividad.
• Atracción y retención de talento a través del denominado salario emocional.
• Disminución de costes por bajas laborales y por la reducción de errores, dado que los trabajadores expuestos a estrés o ansiedad están más expuestos a cometer errores.
• Mayor compromiso con la organización. De esta forma, los trabajadores son más conscientes y demandantes de la salud psicológica.
• Mejora del ambiente laboral.
• Mejora la imagen de la empresa frente a empleados y clientes.

Ante el aumento de la importancia adquirida de la salud mental en el ámbito global, y desde diferentes áreas como pueden ser la social, política y sanitaria, las organizaciones están manifestando su preocupación y tomando acciones para su gestión. Es por ello que que organizaciones como Mutua Madrileña y Orange ya cuentan con la certificación AENOR de gestión de riesgos psicosociales de acuerdo con la Norma UNE-ISO 45003.

El cuidado de la salud emocional y la salud psicológica de las personas que trabajan en Mutua Madrileña es una de las prioridades de nuestra política de salud y bienestar. Convertirnos en la primera empresa que recibe el Certificado AENOR de gestión de riesgos psicosociales supone un reconocimiento al esfuerzo que llevamos realizando en Mutua Madrileña desde hace tiempo para conseguir unos entornos de trabajo más saludables y seguros.

Pero en Mutua Madrileña no nos conformamos con ser la primera empresa certificada en la seguridad y la salud psicológica en el trabajo en España, y nos marcamos como objetivo seguir avanzando en el bienestar de nuestros empleados para servir de ejemplo a otras empresas que quieran apostar, como nosotros, por el cuidado de la salud emocional en el entorno laboral.

Aunque en Mutua Madrileña llevamos muchos años trabajando en la salud y bienestar de nuestros empleados, tras la crisis sanitaria que supuso el COVID-19 las afecciones relacionadas con la salud emocional se incrementaron de forma generalizada en toda la sociedad, por lo que en Mutua decidimos ampliar nuestro sistema de gestión de seguridad y salud en el trabajo. Así, pusimos en marcha un plan de acción dirigido a evaluar los peligros psicosociales que pueden afectar a los trabajadores, con el fin de minimizar los riesgos y aumentar y fomentar el cuidado emocional para toda la plantilla.

La certificación de AENOR de gestión de riesgos psicosociales según la Norma ISO 45003 se consiguió tras someternos a una exhaustiva auditoría que analizó las políticas, los sistemas, los procedimientos y los controles con los que cuenta Mutua Madrileña para garantizar la correcta gestión de los riesgos psicosociales de los trabajadores dentro de la compañía.

Gracias a la implicación de la alta dirección, la adopción de la norma internacional nos ha permitido adecuar la gestión hacia procesos eficaces de protección de los trabajadores, sistematizar el trabajo por objetivos, así como enfocarnos a una transversalidad de procesos y a la mejora continua.

Para Mutua Madrileña es un orgullo ser la primera empresa en España que recibe el Certificado AENOR de gestión de riesgos psicosociales y supone, además, un reconocimiento más al firme compromiso de Mutua Madrileña con las buenas prácticas empresariales. 

La consecución del certificado AENOR de Gestión de Riesgos psicosociales en el trabajo ha convertido a Orange en la primera empresa del sector de las telecomunicaciones y la segunda de España en lograr este reconocimiento.

Esta certificación se enmarca en el sistema de Seguridad y Salud en el Trabajo de la compañía y se ha concedido de acuerdo con los requisitos de la Norma ISO 45003, lo que evidencia el compromiso de Orange con el cuidado de la salud de su plantilla.

Para conseguir esta certificación, Orange ha tenido que superar con éxito el proceso de auditoria del equipo de AENOR, que ha evaluado las políticas, procedimientos, recursos y controles que realiza Orange para salvaguardar la seguridad y salud de trabajadoras y trabajadores.

El compromiso e implicación de la Dirección de Orange ha sido un factor clave para lograr este certificado, así como para mejorar de manera continua en la adecuación de sus procesos y en la implementación de programas relacionados con la gestión psicosocial desde una perspectiva de género.

Esta certificación supone un incentivo más para continuar trabajando en el bienestar y en mejorar el día a día del principal activo de Orange, que no es otro que las personas que trabajan en ella. No se trata del primer reconocimiento que la organización consigue en este ámbito, ya que se suma los certificados en prevención y salud laboral de que ya disponía Orange según la Norma ISO 45001 y el modelo de Organización Saludable de AENOR, siendo también la primera empresa de nuestro sector en conseguir esta última.

Asimismo, Orange ha recibido recientemente la certificación Top Wellbeing Company en el marco de los Premios Human Digital Health, organizados por INTRAMA. Estos galardones tienen como objetivo identificar, valorar y reconocer aquellas iniciativas más relevantes en su contribución a la transformación de las organizaciones, generando un impacto en el negocio a través de la gestión de políticas de Bienestar 360.