Con la entrevista al Presidente del Consejo de Administración de AENOR, Carlos Esteban, iniciamos una serie en la que preguntaremos a cada consejero por su visión de la Entidad. Esteban explica los principales desarrollos que han puesto a AENOR en primera línea de las mejores prácticas en Buen Gobierno.
¿Cómo es el Consejo de Administración de AENOR y cuál es su función?
Actualmente pertenecen al Consejo de AENOR doce consejeros. Está integrado por mi como Presidente; Antonio Garamendi como Vicepresidente; como consejeros dominicales Alfredo Berges, Luis Cediel, Juan Ramón Durán, José Ignacio Cortés, Edmundo Fernández, Luis Rodulfo, Alberto Zapatero y Segundo de Pablo; y como consejeros independientes Luis Atienza y Álvaro Cuervo. También forman parte del Consejo Luis María Cazorla, como Secretario no Consejero y Luis Cazorla como Vicesecretario no Consejero. Igualmente asiste a los consejos el CEO de AENOR, Rafael García Meiro.
En línea con las competencias y funciones del Consejo que se recogen en los Estatutos, tiene un papel estratégico real; decidiendo las grandes líneas de la acción de la Entidad. AENOR está orientado a prestar un servicio bien definido en su propósito: contribuir a la transformación de la sociedad creando confianza entre organizaciones y personas. Para lograrlo es un activo principal la variedad de conocimiento que se suma en el Consejo; con personas expertas y profundamente conocedoras de las necesidades de sectores clave y de la vida económica en general. Una combinación que hace posible la aportación de valor que las empresas y los sectores demandan a AENOR.
¿Qué valoración hace de la evolución de AENOR desde su nueva etapa como sociedad?
Ese hecho se produjo en enero de 2017, correspondiendo su propiedad a la Asociación Española de Normalización, UNE. Desde su inicio todo el Consejo respaldó el compromiso con las mejores prácticas de Buen Gobierno y, con el apoyo de los servicios técnicos de AENOR, se han registrado importantes avances que han puesto a esta Entidad en primera línea.
Antes me refería a la presencia de consejeros independientes, con una activa y valiosa participación; pero también se han registrado notables progresos en materia de documentos y órganos de trabajo con capacidad de decisión. En este segundo campo se han creado la Comisión de Auditoría y la Comisión de Nombramientos y Retribuciones. Además, se ha trabajado en la ya existente Comisión de Responsabilidad Corporativa del Grupo UNE.
Respecto al campo de los desarrollos documentales y sistemas, donde ya se disponía de un Sistema de Prevención de Delitos; destacaría el Código Ético de AENOR y sus sociedades. Además, se está trabajando en la implantación del Sistema de Gestión de Compliance Penal según la norma española UNE 19601.
¿Cuál es su visión del futuro de AENOR?
En enero de 2018 comenzó la implantación de una Estrategia de Transformación muy amplia y ambiciosa; cuyos ejes principales son la transformación cultural, ser más ágiles a través del desarrollo digital y el reposicionamiento de la Marca. Ya estamos recogiendo resultados, que están siendo posibles gracias a la buena acogida y el compromiso del gran cuerpo de profesionales que es uno de los principales activos de AENOR.
Este salto adelante garantiza que ahora y en el futuro AENOR siga prestando un valor único a los sectores, desarrollando herramientas de competitividad adaptadas a las necesidades en evolución de las empresas.