Agrosostenibilidad: una realidad que continúa avanzado

En ocasiones nos preguntamos cuándo lo que percibimos como una tendencia se encuentra ya integrado en nuestro día a día. Desde hace tiempo venimos observando cómo las empresas incorporan prácticas agrosostenibles en sus sistemas de trabajo para dar respuesta a la creciente relevancia que los consumidores otorgan a este aspecto, especialmente las nuevas generaciones, convirtiendo esta tendencia en realidad.

La producción de cultivos sostenibles constituye una demanda real por parte de la sociedad; es una oportunidad para las organizaciones del sector alimentario y sus marcas para establecer nuevos vínculos con el consumidor basados en valores.

AENOR, siendo fiel a su propósito de generar confianza entre organizaciones y personas, desarrolló en 2020 en colaboración con el sector productor citrícola el certificado de Producción de Cultivo Sostenible, que incluye factores imprescindibles para alcanzar un modelo productivo sostenible que compatibilice la generación de valor y empleo con la viabilidad socioeconómica de las explotaciones y el respeto al medio ambiente.

Desde entonces, AENOR ha seguido trabajando para ampliar esta certificación a otros sectores y continuar dando respuesta a las nuevas demandas de las organizaciones y la sociedad en este ámbito.

El resultado son varios esquemas de certificación para la producción de cultivo sostenible hortícolas de hoja, y producción de trigo y harina sostenible, de los que ya se han emitido los primeros certificados. Y seguimos trabajando para que nuevos tipos de cultivo puedan unirse a este concepto de agrosostenibilidad.

Integrada en las soluciones de la Plataforma de Confianza: “Alimentar de forma sostenible”, la certificación AENOR de Producción de Cultivo Sostenible tiene como objetivo generar confianza en las relaciones entre los productores y el consumidor del siglo XXI, que cada vez valora más los atributos de un alimento relacionados con un modelo de producción sostenible.

Así, la preocupación por consumir productos más saludables y respetuosos con el entorno constituye uno de los principales motivos para la decisión de compra, optando por productos de proximidad o con un mínimo procesado.

El consumidor está creando nuevos vínculos con las marcas y los establecimientos donde compra, atendiendo a valores compartidos. Este comportamiento se ha visto reforzado desde 2020 a raíz de la pandemia ocasionada por el COVID-19, observando un cambio de tendencia a favor del consumo de alimentos de origen vegetal al considerarlos más saludables, de mejor digestión y con procesos de producción más sostenibles.

De esta forma, la preferencia de los consumidores a la hora de llenar la despensa con productos frescos como frutas, verduras y hortalizas, además de otros alimentos, pasa por identificar los productos con una marca que aplique criterios de sostenibilidad en la producción agrícola. Es el  caso de certificación AENOR de Producción de Cultivo Sostenible, logrando un equilibrio y minimizando el impacto en el medio ambiente.

Y es que, en los últimos meses, el factor de compra más valorado de una marca por parte de los consumidores apunta hacia la sostenibilidad por encima del precio, según el Estudio Shopper, elaborado por Basque Food Cluster y Across The Shopper.

El investigador Eduardo Moyano (IESA-CSIC) define la agroecología desde una óptica actualizada como el “conjunto de prácticas agrícolas que, aun no siendo tradicionales, contribuyen de manera efectiva a la sostenibilidad ecológica, social y económica de las áreas rurales y urbanas”.

La certificación AENOR de Producción de Cultivo Sostenible se basa en el concepto de agroecología y se encuentra totalmente alineada con la estrategia de Europa en la Agenda 2030. Su objetivo no es otro que proporcionar alimentos saludables mientras se mantiene la productividad, aumenta la fertilidad del suelo y la biodiversidad, y reduce la huella ambiental de la producción de alimentos.

El origen de este primer trigo de producción de cultivo sostenible certificado en España por AENOR se encuentra en Barásoain, Navarra, donde la Cooperativa Cerealista Valdorba, socia del Grupo AN, produjo en la campaña 2021 un total de 200 toneladas de acuerdo con el estándar de producción de cultivo sostenible en cereal establecido por AENOR. Este estándar abarca todo el ciclo de producción, desde la siembra en las explotaciones agrarias hasta el etiquetado del producto en la industria transformadora. La harina de Harivasa también certificada ha sido elaborada con este trigo.

Juan Luis Celigueta, director del Área de Cereales del Grupo AN, afirma que “estamos muy ilusionados y orgullosos de contar con el primer trigo certificado como sostenible de España. Somos la mayor cooperativa cerealista del país y esa posición de liderazgo supone también un nivel de exigencia muy alto para estar al día en todas las demandas y tendencias de los consumidores. La sociedad actual tiene una conciencia muy arraigada del concepto de sostenibilidad y quiere productos que vayan en esta línea, que prioricen la sostenibilidad durante todo el proceso de producción de los alimentos que compra y consume. Para el Grupo AN, esta certificación supone un paso muy importante para seguir avanzando en esa línea.

El trabajo para llegar a ser capaces de obtener esta certificación ha sido muy intenso y se ha desarrollado a lo largo de muchos meses y, desde luego, ha merecido la pena. Estamos convencidos de que se trata de una firme apuesta de futuro. De hecho, durante la presente campaña de cereal hemos aumentado notablemente la producción de trigo certificado, con cerca de 2.000 toneladas, mientras que en la campaña anterior fueron 200”.

Por su parte, Javier Yárnoz, director general de Harivasa, destaca que “este proyecto es un paso más para avanzar en nuestro compromiso con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Desde Harivasa vimos que existía una demanda creciente de la sociedad por los productos sostenibles y de cercanía, y que, por su identificación con ODS, el Grupo AN era el socio adecuado para desarrollar conjuntamente este primer cereal con certificado de sostenibilidad en España. Harivasa tenía ya la experiencia de haber obtenido una certificación equivalente en Francia y consideramos muy importante trabajar para conseguirla también en nuestro país”.

Florette ha apostado por la certificación AENOR de Producción de Cultivo Sostenible para suministrar alimentos de la forma más eficiente y sostenible posible. El proceso de integración de la hoja de ruta pautada por el referencial de este certificado se ha llevado a cabo Florette en dos fases claramente diferenciadas en los aspectos que contempla dicha certificación (social, económico y ambiental):

1. Por un lado, al ser un nuevo referencial para el segmento de hortícolas de hoja, se han realizado frecuentes sesiones de trabajo entre ambas partes (Florette y AENOR) para consolidar el referencial a este nivel.
2. En segundo lugar, se ha realizado una fase de implantación, puesta en marcha y control. Para la producción de nuestros cultivos, se han integrado alimentos que reduzcan la presión sobre los recursos naturales y que favorezcan un adecuado manejo y conservación de la biodiversidad, mediante la reducción de insumos nocivos para el medioambiente. Es decir, reduciendo la huella de producción de dichos alimentos.

Gracias a esta certificación, Florette demuestra que está a la vanguardia del sector agroalimentario, al convertirse en la primera empresa de IV gama (vegetales frescos lavados, cortados y envasados listos para consumir) en conseguirla. Además, este certificado nos permite seguir demostrando con hechos que nuestro compromiso con la sostenibilidad sigue siendo una seña de identidad de nuestra compañía y que forma parte de nuestro ADN desde hace 34 años.

Del mismo modo, el certificado de producción cultivo sostenible nos empuja a seguir siendo responsables a la hora de producir vegetales agrosostenibles por el bien de todos los consumidores y, por consiguiente, del planeta. Esto es así debido a que considera aspectos sociales, ambientales y económicos en el modelo de producción agraria. La misión de Florette es ayudar a las personas a alimentarse mejor; y por eso es importante que ofrezcamos productos de calidad que garanticen la seguridad alimentaria que respeten el ecosistema natural del que proceden