El Grupo Policlínica ha apostado por la certificación AENOR de Protocolos frente al COVID-19 en todos sus centros. Su objetivo ha sido garantizar una adecuada y eficaz gestión del riesgo, así como mantener su actividad en el escenario actual de pandemia en las mejores condiciones de seguridad. Nuevas normas de acompañamiento y visitas a pacientes, teletrabajo o consulta médica telemática en todas sus especialidades fueron algunas de las medidas implantadas.
Rosa García
Responsable de Calidad
Grupo Policlínica
En marzo de 2020 muchos centros sanitarios privados se enfrentaron a su peor crisis debido a la pandemia ocasionada por el COVID-19. Los primeros meses de confinamiento llevaron a Grupo Policlínica a cerrar parte de sus instalaciones sin previsión de fecha de apertura y vio reducida su actividad en un 80 %. En sus 50 años de existencia nunca se había vivido algo parecido en la historia de este hospital, como afirmó en aquel momento Francisco Vilás, propietario del Grupo. En este escenario, la capacidad de reacción y reciclaje fueron básicas para asegurar la actividad.
En primer lugar, se facilitó información a los empleados. Afortunadamente, pocos días antes del estado de alarma se tuvo la capacidad de prever parte de la situación que acontecería y se puso en marcha la difusión de material de formación e información sobre el coronavirus para los empleados con el fin de prevenir contagios. La comunicación fue continua también con pacientes, acompañantes y familiares con información sobre la enfermedad y su prevención, consejos de salud, nuevas normas para acudir a sus centros de referencia, etc.
Asimismo, se implantaron medidas para seguir atendiendo a todos los pacientes. Por ejemplo, medidas de higiene, como la colocación de dispensadores de gel y cartelería con recordatorios de su uso, refuerzo de limpieza en todas las instalaciones; y medidas de seguridad, como la colocación de mamparas separadoras, control de la distancia mínima de seguridad o más espacio y tiempo entre citas médicas, entre otras.
Nuevas normas de acompañamiento y visitas a pacientes; facilitación de teletrabajo a aquellos empleados que pudiesen hacerlo; consulta médica telemática en todas sus especialidades, y nuevos protocolos de seguridad frente al COVID-19 en ingresos hospitalarios y partos fueron otras de las medidas que se adoptaron en Grupo Policlínica.
Actualmente, todas estas medidas se mantienen, actualizan y modifican cuando es necesario según las peculiaridades de cada centro médico o las nuevas normativas procedentes de las autoridades sanitarias.
Tras la experiencia con AENOR en la certificación de otros sistemas de gestión, como el de calidad según la Norma ISO 9001 o UNE-EN 15224 específico para servicios sanitarios, el Grupo Policlínica tuvo claro desde el primer momento que debía someter a una auditoría sus protocolos de actuación frente al COVID-19, ya que eran la clave para seguir asegurando la actividad sanitaria.
AENOR realizó auditorías en todos nuestros centros el pasado mes de marzo, analizando diferentes aspectos:
- Procesos de formación, información y comunicación (interna y externa).
- Prácticas de limpieza y desinfección
- Refuerzo de medidas de higiene personal.
- Implementación de medidas organizativas que garanticen el distanciamiento social ente personas.
- Puesta en marcha de medidas de protección para todos.
- Correcta gestión de residuos.
- Planificación de medidas asociadas a la continuación de la operación de manera que, ante nuevas crisis o rebrotes, se pueda asegurar la continuidad de la actividad de forma segura.
Así, en abril de 2021, todos los centros de Grupo Policlínica consiguieron el certificado AENOR de Protocolos frente al COVID-19: Policlínica Nuestra Señora del Rosario, Eiviconsulta, Clínica Vila Parc y los centros de San Antonio y Santa Eulalia.
La certificación AENOR de Protocolos frente al COVID-19 ha supuesto una mayor seguridad y tranquilidad para los pacientes y ha garantizado la atención con el mínimo riesgo de contagio del virus, tanto a pacientes como trabajadores. Pero, sobre todo, ha servido para garantizar la actividad sanitaria a largo plazo, con las mejores condiciones de seguridad en un escenario de pandemia.
El Grupo Policlínica lleva años confirmando que las certificaciones AENOR de calidad son el aliado perfecto para ofrecer un valor añadido a sus servicios sanitarios
El valor añadido de la certificación
El esfuerzo de toda la plantilla durante los últimos años para someterse a las distintas auditorías que exigen los certificados de AENOR ha servido para mejorar muchos aspectos que benefician a pacientes, trabajadores y al funcionamiento de toda la organización. El Grupo Policlínica ha observado un salto cualitativo que no habría sido posible sin estas certificaciones.
La Norma ISO 9001 ha hecho posible demostrar que Grupo Policlínica garantiza la eficacia de todos los procesos y la prestación de los servicios, mejorando la comunicación y satisfacción de los clientes, internos y externos. En 2017 se realizó la adaptación a la versión de 2015.
Por su parte, la certificación de acuerdo con la Norma UNE-EN 15224 específica para la aplicación en servicios sanitarios ha mejorado los procesos clínicos y asistenciales de la organización. Además, permite dar una asistencia sanitaria centrada en el paciente, primando su seguridad y accesibilidad.
El Grupo Policlínica también cuenta desde agosto de 2020 con la certificación AENOR de acuerdo con la Norma UNE 179002 de Sistemas de gestión de la calidad para empresas de transporte sanitario, lo que implica mayor seguridad en este ámbito.
Por último, el Grupo Policlínica fue el primer hospital en España en conseguir la Q de calidad turística, que garantiza que está preparado para ofrecer servicios turísticos de calidad a sus pacientes.
LA REVISTA DE LA EVALUACIÓN DE LA CONFORMIDAD
