"La reestructuración societaria ha sido un paso natural en la evolución de AENOR"

AENOR viene prestando un valor único que se expresa muy bien en su propósito: “Contribuir a la transformación de la sociedad creando confianza entre organizaciones y personas”. Para crecer en esa capacidad, entre otras vías el Consejo de Administración respalda un programa de adquisiciones; en 2021 se adquiere la mayoría de control de Cámara Certifica y en 2022 la totalidad del capital de Prysma.

La compra de Prysma fue un hito diferenciador, tanto por el tamaño de la organización como por su catálogo de servicios; varios de ellos complementarios de los que se prestaban en AENOR y con un alto potencial de crecimiento.

Los órganos de gobierno de AENOR y los de la entidad propietaria, la Asociación Española de Normalización, UNE, que me enorgullezco en presidir, vieron con claridad que acometer una restructuración societaria se convirtió en un paso natural de la evolución de AENOR. Esta ha tenido como objetivo tanto integrar eficazmente todas las capacidades de Prysma como implantar una estructura que facilite desarrollos futuros; mediante una solución en la línea de la adoptada por conocidas corporaciones. Al mismo tiempo, ha permitido reordenar las capacidades de AENOR basándose en sus distintos ámbitos de actividad.

Como consecuencia lógica, para liderar el holding se ha estimado que la opción más adecuada es que sea el Presidente de la propiedad. La Presidencia del Consejo de Administración de la Corporación es una posición que me hace especial ilusión y constituye un gran reto y motivación por el papel que desempeña la entidad con la que tengo una larga y dilatada implicación. Fui parte del grupo fundador del antiguo AENOR en 1986 y he venido participando de sus órganos de gobierno, por lo que siento una profunda implicación en su evolución.

La construcción del nuevo AENOR ha sido resultado de muchas aportaciones y aquí no quisiera dejar de mencionar la contribución del anterior Presidente, Carlos Esteban, quién lideró el Consejo durante ocho años.

En primer lugar, quisiera felicitar a los órganos de gobierno de UNE y de AENOR Internacional, así como a los directivos de AENOR, sus equipos y a sus asesores por el trabajo brillante que han desarrollado, que ha culminado con la plena entrada en vigor de la nueva estructura societaria el uno de enero de 2024, en la forma que los órganos de gobierno habían aprobado.

Ha sido un trabajo muy meditado y planificado, a la altura del calado de la importante restructuración que se ha acometido. Un paso que se ha dado con toda la seriedad que merecen la significativa cantidad de personas a las que apela; que deben ver sus intereses protegidos y que tienen en la nueva estructura una proyección con capacidad de impulsar su crecimiento profesional. Estas personas son el gran activo que tiene todo el grupo; la corporación y las sociedades vinculadas.

El proceso se planificó con detalle, definiéndose más de mil tareas. Indicamos al equipo ejecutivo que pusiera todos los recursos necesarios para que fuese un éxito, desarrollándose una apreciable inversión en áreas como los sistemas de información y diversos campos de la asesoría jurídica; como la mercantil, tributaria o laboral. Aquí destacaría el extremo cuidado que se ha puesto en la gestión de los riesgos; primero analizándolos y luego minimizándolos para que incluso en el peor de los escenarios pudieran superarse. Por ejemplo, pusimos todos los medios para trabajar bajo los principios de actuación del regulador y que encontrase todo el proceso conforme.

Hace tiempo que el Consejo venía preparando un paso así, asegurando los medios de financiación para realizar esta operación, al tiempo que para el desarrollo de las necesidades del día a día. Hemos obtenido un reconocimiento claro por parte del mercado que expresa la fortaleza de nuestra posición: tenemos un mercado consolidado, los clientes a favor y una marca cada día más reconocida. 

De la sociedad holding, la Corporación Confidere, cuelgan tres sociedades mercantiles: AENOR Confía, AENOR Conocimiento y Cámara Certifica. La compañía insignia del Grupo es AENOR Confía, que comprende la evaluación de la conformidad en toda su extensión, incluyendo nuevas capacidades procedentes de Prysma; así como todas las filiales internacionales del grupo. AENOR Confía aglutina el 80 % del negocio de la Corporación y agradezco a Antonio Garamendi que una persona de su nivel y experiencia haya aceptado presidir el Consejo de Administración.

AENOR Conocimiento trabaja en campos como la transformación de negocio, la formación y los servicios de información sectorial; lo cual incluye la distribución de estándares españoles, europeos e internacionales.

En Cámara Certifica, orientada a las pymes, está presente en su accionariado la Cámara de Comercio de Madrid, con participación en el Consejo tanto del Presidente, Ángel Asensio; como del Director Gerente, Alfonso Calderón. Nuestra entrada en Cámara Certifica, estuvo motivada por nuestra preocupación por reforzar el servicio que prestamos al pilar básico de la economía que son las pymes.

La integración del conjunto es esencial y el Consejo de la Corporación ha encomendado esa tarea al Consejero Delegado, Rafael García Meiro. Ese impulso integrador lleva a que, en las sociedades del grupo con Consejo de Administración, el Consejero Delegado sea la misma persona; garantizando la alineación al estar tanto en el órgano de gobierno de la corporación como en los de las sociedades que la configuran.

Como mencioné, el Consejero Delegado cumple un papel clave para que las directrices estratégicas se traduzcan en acciones.

En el origen de la actividad de evaluación de la conformidad de AENOR está la certificación de producto, que evoluciona conforme a los nuevos requerimientos del mercado. Hay una clara orientación a seguir ese compromiso con los sectores industriales más destacados del país.

Igualmente, con la certificación de sistemas, aunque en ambos casos estando muy atentos a avanzar sobre nuevas tendencias ligadas a la sostenibilidad y el buen gobierno corporativo, imprescindibles para el desarrollo y la buena gestión de las compañías.

En definitiva, se trata de apoyar un modelo de crecimiento responsable que implique un enfoque global -ambiental, social y de gobernanza- en el que estamos trabajando junto a grandes empresas. Este es el modelo que demanda la sociedad, reconociendo positivamente a las empresas que lo siguen.

Hay que destacar el papel de protección a la sociedad que supone la evaluación de la conformidad, porque permite discernir si un producto cumple con una especificación. Forma parte de un ecosistema de vigilancia de mercado, al alcance de cualquier consumidor. 

La ambiciosa transformación de AENOR, que comenzó en 2018, necesitó de una reinversión de los beneficios en la compañía. Ya hemos alcanzado bases sólidas, sistemas de información estructurados y equipos potentes. Por eso ahora la instrucción al Consejero Delegado es la de reforzar, mediante la aplicación de beneficios, el futuro de UNE y la contribución a que la normalización española siga con su valiosa aportación a la sociedad y a los sectores, tanto en una dimensión nacional como internacional. Ello, al mismo tiempo que AENOR sigue progresando en el cumplimiento de su propósito, creando confianza.

Como avanzaba, la Corporación Confidere es la sociedad holding a través de la cual UNE, como dueño único del grupo, es propietaria del capital social de las compañías AENOR Confía, AENOR Conocimiento y Cámara Certifica. Por tanto, su Consejo de Administración tiene una visión de Grupo y debe orientar las grandes líneas estratégicas.

En la Corporación cuento con un Consejo formado por profesionales de primer nivel, con profundo conocimiento de sectores productivos clave, que refleja nuestro origen en una asociación con representación de prácticamente todos los sectores. Quisiera mencionar al Vicepresidente, Luis Rodulfo, a quien agradezco que aceptase esa responsabilidad y con quien estoy trabajando en buena sintonía porque nos anima el mismo objetivo de potenciar el servicio único que presta AENOR.

Asimismo, al Secretario del Consejo de Administración, Luis María Cazorla, que a su condición de personalidad de reconocido prestigio en el ámbito jurídico, suma un profundo conocimiento de AENOR desde sus órganos de gobierno. Por eso, sé bien de su buen juicio y de la tranquilidad que proporciona tenerle en el Consejo.

Desde la constitución como sociedad de AENOR Internacional, una primera preocupación del Consejo de Administración fue ir consolidando herramientas de Buen Gobierno Corporativo. Todo ese trabajo, que pasa a ser asumido tanto por la Corporación como por sus sociedades, inspira el desarrollo de su estructura corporativa.

Todo el grupo se halla en constante adaptación y mejora de sus normas de Buen Gobierno, impulsando un sistema que, adecuándose a su dimensión, propiedad y objetivos, pueda satisfacer los mejores estándares en la materia.

Respecto a la situación general del Buen Gobierno en las compañías españolas, en mi opinión nos encontramos en un buen momento en cuanto a gobernanza. El mayor escrutinio y la demanda de transparencia están siendo atendidas por los consejos de administración, aplicando códigos y desarrollando órganos que favorezcan el comportamiento que la sociedad espera de las empresas.

En AENOR tenemos constancia de que las empresas españolas y el gobierno de las mismas están entre los mejores del mundo, porque venimos certificando su buen hacer en la materia, por ejemplo, con la Certificación de Buen Gobierno Corporativo. Compañías líderes en sus respectivos sectores ya la han obtenido y entre las novedades de la nueva versión lanzada hace seis meses, destacaría que da cabida no solo a sociedades cotizadas, sino también a otras que tengan madurez en cuestiones de gobierno corporativo.